La Armada aprovecha las fiestas navideñas para robar los caballos de la Guardia Real.

Parece ser que la crisis económica que padece España está generando situaciones desesperadas en algunas unidades de las Fuerzas Armadas. Si hace un año anunciábamos en exclusiva que el Ejército de Tierra emplearía caballos para la instrucción de unidades pesadas, ahora parece que ha sido la Armada quien ha decidido tomar medidas similares para asegurar la operatividad de la Infantería de Marina.

Inspección de los caballos para unidades pesadas (2012).

El problema surge del envejecimiento del parque de carros de combate con que está dotada la Brigada de Infantería de Marina (BRIMAR). Concretamente se trata de carros M60 de fabricación estadounidense que llegaron a España en los 90' procedentes del excedente que Estados Unidos mantenía en Europa central. La Armada se quedó con 16 de estos carros, fabricados entre 1960 y la década de los 80'.  Desde ese momento, se encuadran en la 11.ª Compañía de carros del III Batallón Mecanizado (BDMZ-III) de la BRIMAR.

M60 intentando llegar a la playa.

El enfado de la Armada es más que justificado si pensamos que el Ejército de Tierra adquirió los modernos carros Leopardo 2E, fabricados en España pero de patente alemana. Las entregas de estos carros finalizaron en 2008, esto causó un excedente de carros Leopardo 2A4 (53 carros), previamente cedidos a España por Alemania (1998). La mala planificación o falta de interés ha provocado que estos carros se encuentren almacenados en Zaragoza, despiezados, a la espera de ser vendidos o de que pase la crisis. Esta situación enfadó a la Armada que sigue con los carros M60 de la década de los 60'.

Ante esto el Almirante Jefe de Estado Mayor de la Armada (AJEMA) decidió el día 23 de diciembre autorizar al Tercio de Armada (TEAR) la organización de una operación para hacerse con los magníficos caballos de la Guardia Real, en mitad de las fiestas navideñas, aprovechando la falta de personal en los cuarteles. Los caballos servirán en la mencionada compañía de carros en sustitución de los M60, que ya están para achatarrar. Según el General Hertfelder, jefe de la BRIMAR, -a falta de Leopardos buenos son Caballos, si conseguimos que lleguen a la costa-.

Aprovechando que la Guardia Real cuenta con una compañía de Infantería de Marina en sus filas, la operación se organizó desde dentro. Mientras sus compañeros abandonaban el cuartel para dirigirse a los festejos familiares propios de estas fechas, los miembros de la Cia 'Mar océano' se hicieron los distraídos para quedarse rezagados y poder robar los animales. En total fueron 40 los caballos del Escuadrón de Escolta Real que se sustrajeron. Una vez embarcados en los camiones los trasladaron hasta San Fernando (Cádiz), base del TEAR. Allí decidieron que era mejor no perder el tiempo y, tras una breve ceremonia para conmemorar la hazaña, se inició el completo programa de adaptación y certificación de los caballos al medio marino.

Problemas en las pruebas de certificación.

Hoy por hoy, 28 de diciembre, aún está por ver si la idea resolverá los problemas de la BRIMAR, ya que los caballos parecen poco habituados al océano Atlántico y a la mecánica y rutina de las operaciones anfibias. Ofrecen un rendimiento claramente mejorable. Algunos expertos ya han sido contratados para tratar de arreglar el problema, según D.Ros el problema podría solventarse con -una bombona y unas gafas del chino con un tubo de buzo-. Según otro de los expertos, JC.Rodríguez, habría que -instalar unos hidrojets a los animales-. 

La situación en los cuarteles es de calma tensa, ya que la Guardia Real no podrá contar con los caballos para la formación de honores del 6 de enero, previa al acto de celebración de la Pascua Militar en el Palacio Real, con presencia de S.M el Rey. El Secretario General de Naciones Unidas ha apelado desde Nueva York a una resolución pacífica del contencioso.

 Formación habitual del día de la Pascua Militar.

 Jinetes de la Guardia Real reunidos para tomar medidas ante la situación.