Con la voluntad de adaptación y modernización demostrada durante sus 375 años de existencia, el Regimiento “Arapiles” nº 62 ha celebrado, el 19 de enero, el acto de transformación del antiguo Regimiento de Cazadores de Montaña en Regimiento de Infantería “Arapiles” nº 62, tras la desaparición de la Jefatura de Tropas de Montaña y la integración de esta unidad en la nueva Brigada “Aragón” I.
En el acuartelamiento “General Álvarez de Castro” de Sant Climent Sescebes (Girona), el jefe de la Brigada, general Chapa, presidió la parada militar, a la que asistieron diversas autoridades provinciales y locales, entre las que se contaban el subdelegado del Gobierno de España en Girona y la alcaldesa de Sant Climent Sescebes, otros alcaldes del Ampurdán, miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y reservistas voluntarios y veteranos de las Fuerzas Armadas.
Ante todo el Regimiento formado en el patio de armas, su jefe animó a todos los componentes a mantener aquellas virtudes del cazador de montaña que forjaron su espíritu de cuerpo durante décadas, como el compañerismo, la capacidad de sacrificio, la iniciativa y el valor ante el peligro. Unas virtudes que, sin duda, les ayudarán a afrontar el desafío que supone la transformación de sus dos antiguos Batallones de Montaña en el nuevo Batallón de Infantería Mecanizada “Badajoz” I/62 y el Batallón de Infantería Motorizada “Barcelona” II/62. Esta nueva orgánica, además, conllevará una importante renovación de sus materiales y sistemas de armas, y la incorporación de nuevas capacidades de combate, que supondrán un profundo cambio en la instrucción y adiestramiento de la unidad.
Tras el homenaje a los que dieron su vida por España, el acto militar concluyó con el canto del himno del “Arapiles” nº 62.
El acto se celebró el 19 de enero (Foto:Brigada "Aragón" I)
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