El JEMAD cifra en 67.000 los militares que España mantendrá como núcleo duro de las FAS.

(Infodefensa.com) Madrid – Ante la realidad de que el escenario presupuestario para el ministerio de Defensa se mantendrá durante los próximos años en el nivel actual, unos 6.000 millones, el jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), almirante general Fernando García Sánchez, ha preparado una importante reorganización que fija en 67.000 hombres en núcleo duro y despegable de las Fuerzas Armadas.

Esta reestructuración, una de las más importantes de la última década y que adquirirá su capacidad operativa a finales de verano, fija en 15.000 efectivos, la fuerza militar que deberá estar lista en todo momento para desplegarse y permanecer en misiones, lo que representa un aumento de casi el doble en el compromiso de 7.000 hombes marcado hasta ahora con los países que conforman la Alianza Atlántica (OTAN).

Además, 12.000 militares trabajarán en las misiones permanentes de las Fuerzas Armadas y otros 40.000 asegurarán que las rotaciones y el descanso necesarios.

Mayoría de los recursos

El “núcleo duro” de las Fuerzas Armadas españolas, que recibirá la mayoría de los recursos disponibles en adiestramiento y material, se concentrará en la llamada Fuerza de Reacción Rápida Conjunta, lo que deja como segunda prioridad al resto de las fuerzas actualmente encuadradas, alrededor de unos 54.000 hombres.

El JEMAD no explicó en concreto que pasará con esta fuerza no esencial aunque dejó entrever que se producirá una reducción progresiva sin fijar cual será el tamaño final de las Fuerzas Armadas españolas, algo abierto al debate y polémico.

Ante la pregunta de si se plantea proponer una reducción de esta plantilla, García Sánchez reconoció que es una posibilidad que no se descarta, si bien ha dejado claro que una vez que se logre la capacidad operativa total se tendrá una visión más clara.

De este modo, dijo que será a finales de este año cuando se tenga una cierta perspectiva de la necesidad de efectivos y cuando se puedan tomar algunas medidas, tanto para aumentar como para reducir plantilla.

"El 31 de diciembre de 2014 habrá que definir si siguen siendo 120.000 los efectivos de las Fuerzas Armadas. Pero hay margen para reducir", subrayó.

El máximo responsable militar español definió de ”lógico” una progresiva reducción de los efectivos humanos como consecuencia de la implantación de nuevas tecnologías y la necesidad de adecuarse a los recursos disponibles.

Fuentes militares no identificadas señalaron que, por ejemplo, unidades logísticas, de mantenimiento o centros de formación de los tres Ejércitos podrán agruparse en unidades centralizadas y con ello ganar en eficacia.

Fuerza modular

Según sus explicaciones, el núcleo de la Fuerza Conjunta de Reacción Rápida, que estará conformada por efectivos de los tres ejércitos, Tierra, Armada y Aire, tendrá unos 15.000 militares para ser utilizados en cualquier momento y en cualquier teatro de operaciones, de los cuales unos 10.000 sería para comprometerlos en misiones de la OTAN o la Unión Europea y el resto, unos 5.000, para lo que se denomina “amenazas no compartidas”, es decir misiones que tendría que llevar a cabo España para defender sus intereses sin apoyo o colaboración de los aliados.

El resto, unos 40.000 militares, estarán en estatus de adiestramiento, descanso o preparación para el despliegue con el objeto de asegurar las rotaciones –en periodos de cuatro o seis meses- de los 15.000 desplegados permanentemente.

Además, las fuerzas dedicadas a lo que los militares llaman misiones permanentes de las Fuerzas Armadas –otros 12.000 hombres- estarán a disposición de los otros mandos, de Operaciones, de Vigilancia y Seguridad Marítima, Vigilancia y Defensa Aérea, Ciberdefensa e Inteligencia, así como para la Unión Militar de Emergencia.

El JEMAD señaló que la Fuerza Conjunta de Acción Rápida no tiene una estructura permanente, sino que será una “fuerza alistada modular”, sin cadena de mando establecida y permanentemente activada. La idea es que estén operativas de forma permanente y se integren en una agrupación cuando sea necesario.

Esta fuerza, explicó el general García Sánchez, será interoperable, versátil, eficiente, expedicionarias y sostenible, lo que quiere decir que podrá ser desplegada de muchas formas, en diferentes situaciones y con criterios variados, de acuerdo con la crisis o las amenazas que se produzcan en cada momento.

Presupuestos

En relación con presupuestos, el JEMAD reconoció que con los niveles actuales que cuentan los Ejércitos, el mantenimiento de esta fuerza conjunta se situará en niveles de cerca del cien por ciento, si bien ha dejado claro que las cuentas no pueden descender si se quieren tener unas unidades en condiciones.

El general García Sánchez consideró que cuando este activa, la fuerza conjunta debe producir una mayor eficacia en el gasto, ya que teniendo militares disponibles reunidos, no se dispersará el esfuerzo y se concentrará en lo más “eficaz”.

La fuerza conjunta será financiada por el presupuesto ordinario del ministerio de Defensa, si bien las misiones en las que participe –naciones o internacionales- serán sufragadas, como ocurre en la actualidad, a través de ampliaciones de crédito y fondos de contingencia, aprobados expresamente para estas participaciones.

Nuevo mando

El JEMAD informó, asimismo, que próximamente se creará un cuarto mando conjunto, el de Operaciones Especiales, que se ubicará en Madrid.

Hasta ahora, el Estado Mayor de la Defensa dispone de tres mandos directamente subordinados a él: Ciberespacio (creado en febrero del pasado año), el mando de Vigilancia y Seguridad Marítima y el mando de Defensa de Operaciones Aéreas (diciembre).

fuente: Infodefensa.com