El Ejército es una institución viva en evolución constante. De hecho,
hace ya seis años que inició un duro proceso de optimización y
eficiencia. Además, ahora, la Directiva de Defensa Nacional (DDN)
-aprobada por el presidente del Gobierno el pasado julio- manifiesta
unas valoraciones muy precisas de la evolución del panorama estratégico y
marca las exigencias que el Ejecutivo español demanda de sus Fuerzas
Armadas para los próximos años. Por eso, el Ejército acomete una nueva
transformación en la estructura de su Fuerza, según plasma la Directiva
08/12 del JEME, que entró en vigor el 10 de noviembre.
La propuesta apunta a un modelo de fuerzas terrestres realista y
sostenible, dirigido a optimizar las capacidades operativas, teniendo en
cuenta el panorama estratégico bosquejado por la DDN. A saber,
fundamentalmente, un escenario incierto de amenaza híbrida -combinación
de conflicto convencional con confrontación de carácter asimétrico; un
escenario complejo que requiere la puesta en juego de muchas capacidades
distintas- y la existencia de la amenaza no compartida -es decir, la
defensa del territorio nacional frente a amenazas que no son comunes a
las de nuestros socios y aliados-.
No se entiende el gráfico... pero es lo que ha publicado el ET.
Esquema de despliegue de capacidad actual (Foto:DIVPLA)
De igual manera, la Directiva del JEME tiene en cuenta los proyectos
gubernamentales con respecto a las FAS: el aseguramiento de una España
fuerte con la influencia necesaria en el contexto internacional y el
mantenimiento de una capacidad de disuasión creíble y suficiente que
evite la materialización de amenazas en nuestro entorno geográfico. El
Ejército español ha de dar respuesta a todo ello con sus posibilidades
presentes y futuras, teniendo en cuenta que no se parte de cero. Pese a
los propios condicionantes, se busca ofrecer una respuesta rápida y
eficaz al empleo de las fuerzas terrestres por parte del Gobierno, lo
que exigirá una organización adaptable y flexible, cuya característica
fundamental será la polivalencia. Ésta supondrá una evolución en todos
los órdenes: materiales e infraestructuras, mentalidad del personal y de
la doctrina de empleo, organización y preparación para el combate.
Una Fuerza polivalente
La materialización de esta polivalencia vendrá de la mano de una
Fuerza con un conjunto de capacidades que puedan dar respuesta a las
exigencias operativas en todo el espectro del conflicto; contar con
cuarteles generales de entidad superior a brigada, con capacidad para
asumir el mando y control de cualquier tipo de fuerzas y operaciones a
su nivel; transformar las actuales brigadas en Brigadas Orgánicas
Polivalentes (BOP); y disponer de unas pequeñas unidades tácticas y
logísticas especializadas en una función operativa, pero aptas para
asumir otros cometidos.
Las mencionadas Brigadas Orgánicas Polivalentes, cuyo impacto será
esencial sobre la futura estructura de la Fuerza, serán unidades que
combinarán la potencia de combate, la adaptabilidad y la capacidad de
proyección. Su configuración ideal (en cuanto a elementos de maniobra)
sería un batallón de plataformas de tiro tenso, sobre ruedas o cadenas;
dos batallones sobre el futuro vehículo de combate (tipo 8x8, según las
tendencias actuales); un batallón dual con la capacidad 8x8 más los
medios y el adiestramiento necesario para ser aerotransportado; y, por
último, una unidad de reconocimiento, tipo grupo, con capacidades de
Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento (ISR).
No se entiende el gráfico... pero es lo que ha publicado el ET.
Esquema de despliegue de las futuras BOP (Foto:DIVPLA)
Pero pongamos los pies en la tierra, porque disponer de estas BOP
ideales significaría manejar un presupuesto muchísimo más elevado del
existente. Algo impensable. Sin embargo, el Ejército español adaptará
este modelo a sus posibilidades reales y el resultado será dos tipos
distintos de BOP. El primero constará de un batallón dual
aerotransportable, dos o tres batallones más de 8x8 y una unidad de
reconocimiento sin batallón de carros. El segundo, por su parte, será
igual que el primero pero sustituyendo el batallón dual por un batallón
de plataformas de tiro tenso (carros).
Dos modelos de transición
No obstante, estos dos tipos de Brigada Polivalente no se alcanzarán
de la noche a la mañana. Por eso, su consecución pasará por la creación
de dos modelos de transición: la BOP medio-ruedas y la BOP
medio-cadenas. En la medio-ruedas, los batallones 8x8 estarán equipados
con los medios actualmente disponibles -Blindado Medio Ruedas (BMR),
Vehículo de Alta Movilidad Táctico (VAMTAC), Lince, RG-31, etc.- y la
medio-cadenas se dotará con los vehículos de cadena existentes en
inventario -Pizarro, TOA (Transporte Oruga Acorazado), Leopardo, etc.-.
Como se ve, la implantación de este modelo supondrá una adecuación de
los recursos del Ejército de Tierra, en consonancia con el escenario
económico previsible a medio/largo plazo y compatible con el
mantenimiento de las capacidades militares que el Ejército aporta a las
FAS.
Ventajas de las BOP
Además, las BOP permitirán hacer frente, de forma permanente, a las
operaciones de proyección exterior y a los compromisos internacionales,
mediante la rotación secuencial de las brigadas. También aumentarán las
probabilidades de contar con las capacidades adecuadas en el menor
tiempo posible ante cualquier amenaza inesperada, pues se contará
siempre con un conjunto de capacidades medias y homogéneas. Y,
finalmente, el Ejército será capaz de responder escalonadamente ante
situaciones de crisis y en todo momento estará en condiciones para
afrontar la defensa de España.
El planeamiento de este nuevo modelo de Fuerza no se ha hecho a
ciegas, ya que para llegar a él los analistas han estudiado
detenidamente la situación y problemas planteados por la estructura
actual, así como la organización de las fuerzas terrestres en diferentes
ejércitos de países de nuestro entorno. Obviamente, su implantación
implicará cambios sustanciales -sobre todo en la mentalidad del
personal-, pero que se llevarán a efecto con calma, en un proceso no
traumático, que tratará de minimizar el coste personal y familiar que
pudiera generar.
fuente: Ejército de Tierra.
* Estamos en Twitter @Lqt_blog y facebook.
LA MISION PRINCIPAL DE LO SOCIALISTAS ESPAÑOLES, EXTENDIENDOSE A TODOS LOS POLITICOS DE CUALQUIER COLOR, ES DESTROZAR EL EJERCITO, PIENSAN QUE ES SU MAYOR ENEMIGO Y TIENEN FUERZA PARA HACERLO, YA LES FALTA POCO
ResponderEliminarTiene usted toda la razón. Apenas quedan socialistas capaces de asumir que el ejército de España es necesario no solo para hacer frente a los desafíos exteriores sino también para poner en su sitio a cuantos en su engreida posición como casta superior al resto, creen llegada la hora de prescindir de las mismas. Odian a España y admiran a gentuza como los Castro. Fracasaron en 1934, en el 36-39 y volverán a fracasar si deciden dar de nuevo el salto mientras los españolitos que les apoyan se volverán a quedar con el trasero al aire. Son traidores y cobardes por definición además de fracasados.
EliminarTe recuerdo anónimo del 9 de agosto que los socialistas han sido los únicos que se han dignado a incrementarnos los sueldos.... acuérdate de la subida del ministro Bono. Pregúntate si desde dentro no se está mirando para otro lado en ese destrozo. Salu2
ResponderEliminarAnonimo 2...te recuerdo que el PSOE ha llevado a la ruina al pais, a la inoperancia a las FFAA y a la disolución unitaria de la nación creando unidades de comisariado politico entre compañeros. Seamos coherentes,quizas las BOP (lo veo como un calco de las MEU y MEFs del USMC) funcionen en cierta manera pero...¿no acabarian un poco con el espiritu de cuerpo?...¿como funcionará en la realidad fuera del papel?...¿Que sera de las unidades de entidad brigada existentes?¿las adaptaran a este cambio o destruiran sus peculiaridades?
ResponderEliminar